La vida puede ser estresante y llena de cambios imprevistos. Tus sentimientos y pensamientos sobre el mundo y tu lugar en él son maneras importantes de controlar tu salud mental. Al igual que nuestra salud fÃsica, consultar con tu proveedor acerca de cómo te sientes mentalmente no es un signo de estar “loco”. Es posible que la familia y/o los amigos tampoco entiendan cómo te sientes o que tengan sus propios sentimientos y prejuicios en torno a los medicamentos o sobre buscar ayuda. Centrarte en tu propio bienestar en este momento y entender cómo se necesita fuerza para tender la mano y pedir ayuda es la manera más saludable de enfrentar tus sentimientos.
A veces podemos confundir sentirnos mal con ser malos, y el estrés, la ansiedad, la depresión y otras enfermedades de salud mental también pueden afectar nuestra salud fÃsica y bienestar. Si luchas con sentimientos difÃciles no estás solo. Uno de cada cinco estadounidenses padece enfermedades de salud mental. Romper el silencio y luchar contra el estigma es difÃcil, ¡pero es un paso hacia un tú más saludable!
El estigma puede hacerte sentir temeroso de enfrentar el rechazo, los prejuicios y la discriminación, pero hay recursos disponibles para ayudar. No necesitas enfrentar esto solo.
- Las enfermedades de salud mental son la principal causa de incapacidad en los Estados Unidos.
- El tratamiento de las enfermedades de salud mental puede conducir a una mejor calidad de vida y mejoras en el funcionamiento, pero menos de la mitad de los adultos en los Estados Unidos que necesitan servicios y tratamiento reciben la ayuda que necesitan.
El estrés, la ansiedad y las enfermedades de salud mental pueden ser situacionales o más duraderas. Obtener apoyo puede ayudar a disminuir el impacto que estos problemas pueden tener en ti y mejorar tu calidad de vida. Tu visita al consultorio de tu proveedor puede incluir preguntas sobre tu estado de ánimo y el funcionamiento diario. Es importante ser honesto acerca de cómo te sientes para que puedan proporcionar el mejor tratamiento.
Es importante hablar con tu proveedor al enfrentarte a lo siguiente:
- Dificultad para dormir, estar cansado, o estar tan activo que no quieres dormir
- Pensamientos de hacerte daño
- Ver u oÃr cosas que quizá otros no ven u oyen
- Un deseo de “adormecer” tus sentimientos con drogas, alcohol u otras actividades
- Una sensación de que las experiencias pasadas te impiden estar presente y enfrentar las tareas diarias
- Cualquier cambio repentino en tu estado de ánimo o cómo tomas tus decisiones o funcionas
Sabemos que no es fácil pedir ayuda, solo recuerda que tú eres el mejor juez de ti mismo y tu capacidad de ser abierto y honesto con tu proveedor puede tener una gran influencia en tu cuidado y tu capacidad de ser el mejor que puedas ser. ¡Ofrecemos servicios confidenciales y sin prejuicios para la salud mental y estamos aquà para ayudarte a salir contra el estigma!
Si piensas en lastimarte o quitarte la vida, busca atención de emergencia con tu proveedor, o acude a la sala de emergencias más cercana y llama al 911.
¿Qué preguntas hago?
- Me siento irritado la mayorÃa de los dÃas y me enojo con facilidad. ¿Estoy deprimido?
- No me gusta hablar con la gente. ¿Cómo me ayudarÃa la terapia conductual de salud?
- He estado pensando en lastimarme, ¿cómo puedo conseguir ayuda?